miércoles, 13 de abril de 2011

Producción del libro...


Cuando la edición, la corrección y el diseño del manuscrito han concluido llega el momento de ver materializado todo el trabajo realizado, ello a través de la impresión y encuadernación, teniendo como producto final el libro. Datus C. Smith a lo largo del séptimo capítulo de su libro Guía para la publicación de libros hace referencia a dichas actividades, ambas fundamentales para que el producto llegue a las manos del lector.

Según el autor, la imprenta únicamente recibe el manuscrito y, siguiendo con las instrucciones del diseñador, lo convierte en libro. La imprenta no se preocupa por el contenido del libro, sólo lo materializa. Por ello, los editores deben tener conocimientos acerca del proceso de impresión y encuadernanción, además de saber con presición cómo quieren que luzca la pubicación.

En la manufactura de un libro intervienen tres procesos básicos: 1) manufactura, 2) impresión y 3) encuadernación. Respecto a la composición existen varias formas de llevarla acabo, tales como: la manual, el monotipo , linotipo, intertipo y la caligrafía. No sólo se toma en cuenta el texto, las ilustración también son consideradas en dicho procedimiento, ya sean en blanco y negro o a color.

La impresión consiste en la aplicación de la tinta al papel, ya se de manera directa con tipos metálicos, litográfica (offset/litho), sin presión (xerografía), serigrafía y prensas especiales. El tipo de impresión a elegir depende de los recursos económicos de la editorial para el proyecto, la cantidad de ejemplares a imprimir, las características de la obra y el equipo disponible.

Por último, la encuadernación implica doblar y compaginar las hojas de tal forma que las páginas queden en el orden indicado, fijar todas las hojas de algun modo, refilar las orillas y colocar la cubierta protectora.

El doblado es posible realizarlo de forma manual con ayuda de "dedos de hule", mesas giratorias y bastidores. Cuando la cantidad de libros impresos es muy grandes se utilizan máquinas compaginadoras, esto en países desarrollados.

Luego de doblar y compaginas las hojas debe ser sujetadas ya sea por medio de grapas únicamante o de métodos más costosos, tales como: la encuadernación americana, en la cual se refilan los cuatro lados, las hojas son prensadas y se les aplica un pegamento especial; o la encuadernación rústica, en ésta sólo se refilan tres lados, la parte del lomo es perforada, las páginas son prensadas y aseguradas con pegamento.

El tipo de papel es un aspecto que el autor considera importante en la impresión del libro, pues existe una variedad infinita de éstos. Y es una de las cualidades del editor conocer los tamaños de la hoja, el material de su elaboración, el peso, la opocidad, el grosor, la superficie, el color, la resistencia, la calidad y su tendencia a cambiar de color con el tiempo. Así el editor sabrá elegir adecuadamente el papel más económico y apropiado para determinada obra.

Como conclusión, Smith considera que un buen editor debe estar familiarizado con la industria de la impresión y encuadernación, comprender las necesidades de la imprenta para que éstas sean contempladas en la adquisición de nuevos y mejores equipos, lo cual se verá reflejado en la materialización de los libros.


  • Datus C. Smith: “7. Producción del libro: impresión y encuadernación”, en: Guía para la publicación de libros, UdeG- ASEDIES/ México, 1991

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